viernes, 27 de marzo de 2015

La transición y ese niño de la foto

 
"El periodo de transición política ha terminado. En apenas dos años, los españoles hemos transformado, desde la legalidad, un sistema autoritario de gobierno en una democracia pluralista". El expresidente Adolfo Suárez González (1932-2014), anunciando el 29 de diciembre de 1978, la convocatoria de elecciones generales para marzo del año siguiente.

Existe cierta conformidad en situar el inicio de la transición en España a partir de  la desaparición del general Franco, el 20 de noviembre de 1975, tras la cual el denominado Consejo de Regencia asumió, de forma transitoria, las funciones de la Jefatura del Estado hasta el 22 de noviembre, fecha en la que fue proclamado rey ante las Cortes y el Consejo del Reino Juan Carlos I de Borbón, que había sido designado seis años antes por el general Franco como su sucesor “a título de rey”...

Yo creo que la transición española dio comienzo el pasado 9 de Noviembre con la votación por parte de Catalunya en su proceso soberanista. Me explico; estamos viendo sucesivamente como los políticos o si se prefiere, el poder, que hasta ahora debían gestionar esa sucesión o evolución de un régimen opaco y cerrado a uno de trasparencia y apertura, se han limitado entre otras cosas, a enriquecerse ilícitamente desde su posición de privilegio. Pero ya no es solo el tema económico-corrupción al que asistimos día sí, día también. Si no a la propia manera en la que se ha hecho política estos últimos 40 años. Ese niño de la foto, de celebración, no ha visto ni ve que ha habido una nula capacidad e interés para ello, y de ahí una parte del auge independentista. A grandes trazos, el 9 N, ha llegado como consecuencia de múltiples factores, pero a mí entender, la incomprensión de los gobiernos sucesivos del PP o del PSOE sobre la realidad plurinacional del Estado ha jugado un papel imprescindible. La falta de respuesta a las demandas de la sociedad catalana ha puesto en evidencia las grietas del proyecto constitucional del 78 que se diseñó bajo las premisas de “un federalismo imperfecto” y que, en lugar de avanzar y progresar hacia su pleno desarrollo, ha ido retrocediendo hasta llegar a un centralismo insoportable del que además se siente orgulloso. Empezando por los sucesivos avatares del Estatut y siguiendo con ‘todo lo demás’, han activado a una sociedad catalana cuyo movimiento hoy es imparable.
 
                                          
                                                             
Especialmente alarmante es comprobar cómo el Gobierno central afronto la realidad del 9N, que no hizo más que evidenciar el fracaso de un modo de hacer política. La negativa a abordar con los instrumentos de la política lo que estaba ocurriendo en Cataluña ha alimentado las filas del independentismo y encrespado los ánimos de una sociedad que, aun así, hizo del 9N un acto de civismo ejemplar. El gobierno español no dudó en calificar la consulta catalana como ilegal, sin haber dado la más mínima oportunidad para llevarla a cabo de manera acordada, vinculante y con garantías plenas. Recuerdo que la misma noche electoral argumentaba que el 9N carecía de valor político, cuando si algún valor especial atesora la consulta es el del civismo de sus más de dos millones de ciudadanos y ciudadanas votando y sus más de 40.000 voluntarios acreditados en el proceso y velando por él. Este 27 de Marzo ese niño de la foto, joven en la transición, ha cumplido años. Y sigue sin enterarse que ya han pasado 40 años y no hemos avanzado. Ahora esa sociedad catalana y madura tiene derecho a obtener una respuesta política a sus reivindicaciones y esa respuesta no es otra que votar al amparo de la ley en las elecciones del 27 de septiembre de 2015.Porque no es preguntarle a la sociedad lo que la divide, sino no tomar en serio sus reivindicaciones. Cuando el próximo 20 de Noviembre se cumplan esos 40 años de transición, yo seguiré opinando que en todo caso será el comienzo de la verdadera metamorfosis de lo que se conoce como España. Algo va a cambiar. Seguro.

J L Herrera Vega
Ciències de la Informació i de la Comunicació
El Comunicado

viernes, 20 de marzo de 2015

Vergüenza en diferido y en directo

“Que caiga España, ya la levantaremos nosotros”. Cristóbal Montoro, actual ministro de Hacienda y entonces portavoz económico del PP, a la diputada canaria Ana Oramas para que no apoyara al Gobierno socialista en la aprobación del paquete de recortes en mayo de 2010.

La Agencia Tributaria ha calculado esta semana en un nuevo informe remitido al juez Pablo Ruz, del caso Gürtel, que el Partido Popular pudo dejar de tributar más de 220.000 euros de impuesto de sociedades por los 880.000 euros en donaciones presuntamente irregulares que habría recibido en 2008 según los papeles de Bárcenas. Sin embargo, reitera en que no hay delito fiscal al considerar que estas cantidades están exentas de tributación “como lo están las donaciones que reciben Cáritas y Cruz Roja”, según el informe. Si se destinan al objeto principal de la entidad, en este caso al Partido Popular, no hay responsabilidad fiscal.

Según la Agencia Tributaria, las donaciones a entidades sin ánimo de lucro "siempre" han estado exentas, y añade que el único requisito legal para la aplicación de la exención es que los fondos se dediquen al objeto principal de la entidad sin ánimo de provecho. Este uso habría quedado "acreditado" en este caso, según hacienda. Y pone como ejemplo, que si un empresario dona 400.000 euros de dinero negro aCáritas y esta entidad da de comer a 1.000 niños con ello, es decir, lo destina a su fin, el ordenamiento tributario no reacciona determinando que la ONG haya cometido delito fiscal por no tratarse esa donación como ingreso tributario ¿ ? ¿Se puede comparar la labor de Cáritas con la de un partido como el PP?
                                            
                                                   

O sea, las supuestas donaciones ilegales que habría recibido por importe de 888.000 euros, no son un delito. El ejecutivo considera que la base imponible calculada, al computar ingresos pero no gastos, resulta "irreal y contraria al principio de verdad material", y que por supuesto "no se alcanza la renta obtenida por la entidad realmente, materialmente, sino una simulación ficticia", segun el informe. Me viene a la memoria el despido en diferido del extesorero Bárcenas por la Secretaria General del PP, Dolores de Cospedal. Vergüenza en diferido y en directo, diríase. Aquí todos somos hacienda, menos los que la controlan. El Estado. Más de lo mismo...

J L Herrera Vega
Ciències de la Informació i de la Comunicació
El Comunicado

viernes, 13 de marzo de 2015

Estilo 'Spanish'

Decía Napoleón Bonaparte que, "Es más fácil engañar que desengañar".

Se dice de Podemos, que son el máximo exponente del populismo y la demagogia, que su discurso tiene las patas muy cortas. Que ya se le están está viendo las vergüenzas a quienes quieren dar lecciones de ética por los últimos casos de Monedero y compañía. Y por supuesto no son capaces de resistir un mínimo embate político. Pero esta formación que según los datos que se derivan de la encuesta del CEO, Centre de Estudis d ‘Opinió de la Generalitat, hecha pública este viernes siguen ganando adeptos en Catalunya. La encuesta está hecha con una estimación de participación del 68% y refleja que un 11,6% de los electores no sabe qué votaría. Y esa es la gran cuestión. Podemos va ganando posibles electores gracias al recurso de la pataleta por la desilusión y la situación reinante. Cada ciudadano descontento con los dos grandes del bipartidismo estatal son atraídos como fuerza gravitatoria a dicho partido. Y no solo del PSOE Y del PP.
 
 
                                                                 

 El sondeo indica que la mayoría absoluta que suman CiU y ERC en el Parlament de Cataluña no se repetiría si hoy se celebraran elecciones autonómicas en Cataluña, no hay que olvidar que las circunstancias actuales contemplan unos parámetros diferentes. Si bien sería la primera vez que no tienen la mayoría desde 1984, seguirían siendo las fuerzas políticas más votadas. Convergencia i Unió se quedaría con 31 o 32 escaños respecto a los 50 que tiene actualmente y Esquerra Republicana conseguiría 30 o 31, diez más que en la actualidad. En cambio, Ciutadans y Podemos rivalizan por la tercera plaza en el Parlament, con 16 o 17 escaños cada uno de ellos. ¿A que se debe esta abducción de votantes del partido de Pablo Iglesias, en Catalunya? Se podrían enumerar diferentes versiones, pero me quedo con la del discurso fácil y de retorica popular. Para empezar, los promotores de la organización rechazan la dicotomía tradicional derecha - izquierda y, pasando del esquema horizontal a otro vertical, enfrentan oligarquía y democracia. Y eso cala hondo entre la descontenta masa indecisa de ciudadanos catalanes. Identifican a los oligarcas financieros y empresariales con los políticos de los grandes partidos que servirían sus intereses, y sobre todos ellos arrojan el término “casta”. Y con sus ‘odas’ al viento como: “Contra la Oligarquía, la Participación” o “Frente a la Casta, los Ciudadanos”, van haciendo camino. Eso sin entrar a valorar si es válido o no, es lo que los descontentos ciudadanos quiere oír. Es algo muy del pueblo. De ahí su populismo.

Por el contrario los partidos soberanistas como ERC o CiU se desgastan con el proceso. Hoy en día no dejarse arrastrar por la corriente de lo folclórico, de lo castizo, dejando claro que la postura por un ideal político tiene su coste, no está a la altura de que todos lo puedan reflexionar. Hoy en España o en una ciudadanía cataloespañola lo sencillo, lo común, lo habitual, la norma en una palabra, es ir contra todo y contra todos los que no piensan como nosotros. Estos dos partidos en cambio, o por lo menos ERC, tienen algo más que ofrecer que el estilo ‘spanish’ de Podemos o Ciutadans. Ese de vender cantos de sirenas para después tartamudear ante la rectificación y al final defenderse atacando como hacen los de siempre. Los ideales son distintos, como distinto es lo que se quiere alcanzar en las próximas autonómicas. Cuando se vaya aproximando la cita resurgirán las verdaderas identidades. En cualquier caso, los dos partidos catalanistas han tomado nota y seguro que están afinando la voz de aquí al 27 de septiembre. Ya hay Full de Ruta

J L Herrera Vega
Ciències de la Informació i de la Comunicació
El Comunicado

viernes, 6 de marzo de 2015

Miedo, tengo miedo, de perderte


“El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son”. Tito Livio (59 AC-64 AC) Historiador romano.

El Gobierno español sigue sumido en el miedo. Ahora ha decidido presentar, después de unos días de amenazar con ello, un recurso de inconstitucionalidad contra la ley catalana de ‘Acció Exterior’, tras opinar que la Generalitat está haciendo uso de ella para adoptar medidas que afectan a la política exterior de España, y cuya dirección sólo corresponde al Ejecutivo central. La autorización para presentar el recurso ante el Tribunal Constitucional ha sido adoptada en el Consejo de Ministros de este pasado viernes, tras haber analizado los informes de la Abogacía del Estado. El ministro Margallo ya cuestionó hace unos si las oficinas en el exterior de la Generalitat eran para impulsar la lengua o la cultura catalanas, cosa que sorprendentemente dijo, podría hacerse en colaboración con las embajadas de España, o para “alentar el proceso secesionista”.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, no tardó en comenzar a adoptar medidas que alarmaron al Ejecutivo de Mariano Rajoy, como la publicación de un decreto por el que se abrían nuevas delegaciones de la Generalitat en Roma y Viena, sin haberlo comunicado antes a los Ministerios de Asuntos Exteriores y Hacienda, como se establece en la Ley de Acción Exterior y del Servicio Exterior del Estado. El decreto ha sido recurrido por la vía de lo contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. Y en comparecencia pública, la vicepresidenta primera Soraya Sáenz de Santamaría ha señalado que la "dirección y ejecución de la política exterior le corresponden al Estado" y que el Estatuto de Catalunya "contempla algunas acciones" que puede realizarse en el exterior por parte de la Generalitat, sin embargo, en la ley catalana "busca desarrollar una diplomacia pública de Catalunya", pero como la autonomía catalana no es Estado no puede ejercer tal acción, ha advertido.
 
                                                         
  Pero hay más, el Tribunal Constitucional ha anulado varios preceptos de la ley del Síndic de Greuges por considerar que invade competencias exclusivas del Estado en materia de relaciones internacionales. La ley catalana atribuye al Sindic la condición de Autoridad Catalana para la Prevención de la Tortura y de otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, regulando dicha atribución. El TC en cambio, declara su inconstitucionalidad por invadir la competencia que, en materia de relaciones internacionales, la Constitución atribuye en exclusiva al Estado español. La sentencia explica que no todas las actividades con proyección exterior constituyen materia de “relaciones internacionales, pero hay actuaciones que, en todo caso, han de quedar fuera de la actividad con proyección exterior de las Comunidades Autónomas”. Señalando que, “el Estado puede establecer medidas que regulen y coordinen las actividades con proyección externa de las Comunidades Autónomas”.

Ahora veo más que nunca que cada acción desesperada de acudir al TC es por miedo, porque no se puede hacer otra cosa. Me viene a la cabeza aquella canción de las folclóricas que decía lo de, “Miedo, tengo miedo, de quererte. Miedo, tengo miedo, de perderte...”. El ejecutivo ve que Catalunya va en serio con el proceso soberanista y ante el miedo a la perdida lo único que sabe hacer es tirar de TC. Hasta cuando todos estos despropositos. Con el hecho de obligar a cambiar los ‘nombres’ de oficinas de “Acción Exterior”, por ejemplo a “Centros Culturales Exteriores”, o el de “Representante permanente ante la Unión Europea”, por el de “Representante de la Cultura en Europa”, ya podría haber bastante para volver a empezar. ¿O se va a mandar a la Guardia Civil a Roma y Viena? ¡Eso sería para ‘per llogari cadires’! Hay que ver que malo es el miedo…

J L Herrera Vega
Ciències de la Informació i de la Comunicació
El Comunicado